Eliminación de COV clorados en el sector farmacéutico
El cloruro de metileno, o diclorometano (DCM), es un disolvente con una gran variedad de aplicaciones en sectores tan variados como el alimentario y el aeronáutico. En la industria farmacéutica, se utiliza para extraer sustancias químicas de plantas o alimentos para medicamentos como esteroides, antibióticos y vitaminas. Sin embargo, es tóxico para la salud humana, con el potencial conocido de irritar la piel y dañar el sistema nervioso central. Por lo tanto, las emisiones al aire que contienen DCM están sujetas a controles estrictos, que varían entre países e industrias. El carbón activado es un método muy eficaz para purificar las emisiones atmosféricas de DCM, ya sea solo o para 'pulir' las emisiones que ya han sido tratadas, por ejemplo, mediante condensación criogénica.
El problema
Nuestro cliente, una empresa mediana, es una de las muchas en Italia, que produce productos en nombre de los principales nombres del sector farmacéutico . Se le encargó fabricar tres lotes de una molécula con fines de registro, con miras a iniciar la producción a gran escala en una fecha posterior.
El proceso de producción daría como resultado emisiones a la atmósfera de un reactor que contendría compuestos orgánicos volátiles (COV) con cantidades más pequeñas de tolueno y otros compuestos.
En Italia, las plantas que comienzan a producir hoy están sujetas a límites de DCM muy bajos: al menos por debajo de 20 mgC/m 3 y, a veces, tan bajos como 5 mgC/m 3 . Este límite legal no se aplicó en este caso ya que era solo una prueba, pero el cliente sabía que necesitaba encontrar una solución a largo plazo y quería probar esto de antemano.
Como las emisiones de COV clorados se emitirían por venteo y despresurización de los tanques, el caudal sería muy bajo: alrededor de 200 m 3 /h. Otras empresas que proporcionaban filtros de carbón activado le habían dicho al cliente que ninguno era adecuado para caudales bajos debido al riesgo de canalización, cuando las emisiones encuentran el camino más fácil a través de un filtro, saturando algunos puntos del lecho del filtro y dejando el resto intacto.
Por lo tanto, el cliente creía que su única opción era la condensación criogénica, que consiste en bajar la temperatura de las emisiones para que los contaminantes se conviertan en gotas líquidas, que luego pueden tratarse.
Este método es costoso y es posible que no elimine por completo los contaminantes de las emisiones. El equipo también es complicado de instalar, por lo que no es adecuado para una prueba.
La solución
El cliente se encontró por primera vez con DESOTEC en la feria comercial Ecomondo en noviembre de 2019 en Italia y descubrió, para su sorpresa, que podíamos ofrecer un filtro adecuado para caudales bajos: el AIRCON 2000 C.
Este modelo está específicamente diseñado para tratar caudales de aire muy bajos y evitar canalizaciones. Además, puede manejar picos de concentración, como es típico de las emisiones liberadas cuando se abren los reactores.
Como los filtros de DESOTEC son fáciles de instalar o quitar, y están disponibles en régimen de alquiler diario, el cliente puede probarlos antes de tomar una decisión a largo plazo. Aunque el cliente no necesitaba una solución inmediata, decidió adoptar un enfoque proactivo.
Dos semanas después de esta reunión inicial, DESOTEC había llevado a cabo evaluaciones preliminares. En un mes, instalamos dos filtros AIRCON 2000 C en la planta, listos para comenzar de inmediato.
Los resultados
La producción siguió adelante en los tres lotes de prueba, con el cliente monitoreando las emisiones para evaluar los filtros DESOTEC. Encontró que las concentraciones de DCM después del tratamiento estaban muy por debajo de 5 mgC/m 3 , alrededor de 1 o 2 mgC/m 3 .
La empresa estaba encantada y ahora está lista para implementar el sistema DESOTEC cuando comience la fabricación a gran escala de este producto.
En procesos de producción discontinuos como este, el carbón activado es una solución rentable: las emisiones simplemente pasan a través del filtro y los contaminantes se adsorben si están presentes. Sin embargo, la condensación criogénica requiere el uso de energía, ya sea que las emisiones contengan o no contaminantes, lo que eleva los costos.
Los filtros DESOTEC también podrían usarse para 'pulir' las emisiones que han sido tratadas criogénicamente, antes de descargar el aire limpio de manera inofensiva a la atmósfera.
El cliente también está satisfecho con la facilidad con la que se instalan o retiran los filtros DESOTEC , lo que les permite expandir la producción rápidamente sin necesidad de una inversión inicial.
Esto les ofrece la flexibilidad de ganar nuevas comisiones de clientes externos, realizar pruebas y expandir su negocio cuando sea necesario.
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